como poner una queja en una comunidad de vecinos

Cómo plantear una queja en la Comunidad de Vecinos

Cuando existe algún conflicto en una finca es muy importante saber cómo plantear una queja en la comunidad de vecinos. Lo primero que hay que tener en mente es la posibilidad de llegar a un acuerdo. Es por eso que la queja debe ser planteada con educación, respeto y dentro de la legalidad. Si se recurre a las voces, a las malas palabras o a las amenazas la resolución del conflicto será más complicada porque, además del conflicto vecinal, surgirán rencillas personales que son mucho más difíciles de solventar. Además, en el futuro esto resultará en una peor convivencia y el objetivo es evitar eso a toda costa. Por ese motivo, aunque parezca imposible, siempre hay que mantener la compostura.

Una vez mentalizado, es el momento de presentar la queja formalmente ante la comunidad de vecinos para resolver el conflicto lo antes posible. Sin importar la naturaleza de la queja, ya sea por ruidos excesivos, el uso indebido de las instalaciones o por problemas económicos, siempre seguiremos estos pasos para presentar una queja de forma oficial:

  1. Conoce las normas en las que vas a basar tu queja.
  2. Dialoga con los vecinos.
  3. Traslada la queja a la comunidad de vecinos.
  4. Impón una demanda judicial.
  5. Realiza una denuncia formal.

Analiza la normativa vigente

Antes de empezar a plantear una queja debes hacerte esta pregunta ¿es la queja legítima? Es decir ¿se trata de algo que puedes reclamar por derecho o es una disputa personal? Si se trata de algo motivado por la emoción o de carácter subjetivo y no tiene amparo legal, consulta primero con tu administrador. Él te informará sobre si tiene sentido plantear la queja porque tienes las de ganar legalmente o si es mejor hablarlo educadamente y esperar que todo salga bien.

En cualquier caso, para tener la mano ganadora en cualquier conflicto entre vecinos, lo más importante es saber a qué leyes atenerse. Por ese motivo, debes informarte bien sobre:

Puedes asesorarte realizando una búsqueda rápida en Google y después confirmarlo con tu administrador de fincas colegiado. Sin duda, esta será la persona que mejor podrá guiarte legalmente en un proceso de este tipo.

Habla primero con los vecinos

Una vez que conozcas bien las leyes que te amparan podrás hacer frente a tus vecinos sabiendo que tienes razón. De ahí la importancia de informarte sobre las normas. De otro modo, no tendrías nada con lo que argumentar razonablemente.

En cualquier caso, aunque la Ley te ampare, no debes caer en tópicos como amenazar con una denuncia desde el principio. Primero debes intentar resolver el conflicto exponiendo la ilegalidad del hecho que esté sucediendo y buscar un acuerdo común que solucione el conflicto. Si todo falla, será el momento de trasladar la queja a una instancia superior.

Plantear una queja a la comunidad de vecinos

Si al dialogar con tu vecino no consigues solventar el conflicto de un modo informal las cosas se pondrán un poco más serias. Para ello tienes a tu disposición dos entes principales para plantear la queja:

  • El presidente de la comunidad: Como principal responsable de la Comunidad de vecinos, será a él a quien debas trasladarle la queja desde el principio. De este modo contarás con un punto de vista objetivo que podrá ayudarte a mediar con el vecino problemático e, incluso, convocar una junta de vecinos si el problema afecta a muchos comuneros. Esta última opción es de las más aconsejables si existe una buena relación entre la mayoría de los vecinos.
  • El administrador de fincas: Otra alternativa es beneficiarse de la función de mediador que ejerce el administrador de fincas colegiado. Esta persona podrá hablar en tu nombre, en nombre del presidente e incluso en nombre de toda la Comunidad si se le da permiso. Así se evitarán desagradables confrontaciones personales ya que el administrador planteará la queja de la forma más objetiva posible y sin entrar en sentimentalismos.

Ya sea el presidente, la junta de vecinos o el administrador, alguien planteará la queja al vecino infractor para que desista en su actividad. Generalmente, esta opción suele calmar las aguas en la mayoría de casos.

Interpón una demanda judicial

Si todo lo planteado falla y el problema persiste después de haber intentado solucionarlo por la vía pacífica, llegará el momento de tomar la vía legal. Esto supone que, en todo tu derecho, podrás interponer una demanda judicial formal ante los tribunales. Dado que esto puede suponer más de un dolor de cabeza, es importante que te organices bien:

  1. Primero debes recabar pruebas legales de la infracción. Por ejemplo, el acta de la comunidad de vecinos puede ser un material muy útil en el que queda por escrito lo mencionado en cada reunión respecto al problema. También puedes buscar otro tipo de pruebas, aunque procura que sean serias y no te pases en cantidad o el juez podría desestimarlas.
  2. En segundo lugar, y solo tras haber recopilado las pruebas, notifica al vecino problemático de que va a ser demandado y pídele que desista una última vez. Si no cesa, llegará el momento de demandarle.
  3. Revisa bien cuáles son tus derechos y analiza las normativas que se aplican en tu comunidad de vecinos.

Cómo realizar una denuncia formal

Tras haber realizado los primeros tres pasos y buscar asesoría legal, podrás optar a realizar una denuncia por una de estas vías:

  • Denuncia por escrito en el ayuntamiento: Existen documentos a rellenar en la oficina de atención al ciudadano. Cumpliméntalos adecuadamente para iniciar el trámite de demanda. En el mismo documento puedes realizar una reclamación que te indemnice por los daños que hayas sufrido. Ten en cuenta que, para ello, deberás aportar pruebas robustas. Por ejemplo, si el problema es de ruidos, llama a la Policía para que acudan con el sonómetro y pídeles que firmen el informe resultante.
  • Vía penal: En compañía de un abogado, deberás plantear todo el caso y aportar todas las pruebas que tengas a disposición.

Ya sea contra un vecino o contra toda la comunidad, sin importar si eres propietario o arrendatario, tienes derecho a emitir una queja. Todos los vecinos están en la obligación de cumplir con las normativas vigentes y respetar la convivencia. Por ese motivo, si tienes cualquier tipo de conflicto, no dudes en seguir estos pasos para intentar solucionarlo, ya sea por las buenas o por lo legal.

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